Si el otro día hablábamos de la importancia de la digitalización en el sector de los componentes electrónicos, ¿qué decir de la automatización? Hoy hablaremos precisamente de eso. Del papel que juega la automatización en nuestra industria. Y del que juegan los componentes electrónicos industriales dentro de esta evolución tecnológica. Todo ello a partir de nuestra propia experiencia con un almacén automático.
¿Qué es la automatización y por qué es importante?
La automatización se puede explicar de varias maneras. Quizá la más efectiva sea englobar bajo su nombre todo equipo (físico o digital), método y tecnología cuyo objetivo sea el control de un determinado proceso con la mínima intervención humana. Este proceso pasaría a estar automatizado.
El objetivo final a la hora de automatizar es la eficiencia. Todo ello en un entorno, como ya analizamos cuando hablamos acerca de la digitalización, cada vez más competitivo. La automatización permite a las empresas optimizar la producción en un contexto de demanda creciente en unos plazos de entrega cada vez más reducidos.
Por tanto, para poder no ya prosperar sino meramente sobrevivir, en este entorno arrollador y globalizado, automatizar -al igual que digitalizar- es el verbo a conjugar. Se trata de un reto a encarar con decisión.
Los avances en el terreno de la electrónica, la robótica y la programación. La aplicación del machine learning en los procesos industriales o la evolución de los semiconductores. Todos estos, junto a otros, son factores gracias a los cuales la automatización ya no es una quimera para las pequeñas y medianas empresas.
Además, en el horizonte se divisan desarrollos (la internet de las cosas aplicada a la industria, las cadenas blockchain, el uso de big data en la industria) que sin duda implicarán importantes avances para los procedimientos automatizados.
Ventajas de la automatización.
Los datos y la experiencia demuestran que la cuota de automatización crece de manera continuada. Sobre todo entre las PYMES. ¿Por qué? Por las ventajas que conlleva, que terminan superando a las barreras de entrada.
En cuanto a las ventajas, entraremos en detalle cuando pasemos a contaros cuál ha sido la experiencia de Biltron. De momento tienes que saber que la tendencia marca que las tareas más peligrosas, de menor valor añadido y, en ocasiones, las más peligrosas serán realizadas por máquinas.
Entonces, la labor humana en los entornos industriales cada vez va a quedar más circunscrita a tareas de monitorización. Y, sobre todo, a la toma de decisiones. Mejora así el trabajo dentro de la empresa.
Por último, como bien sabes la tecnología optimiza los procesos, reduce tiempos y costes, e incrementa la fiabilidad.
Componentes electrónicos industriales y automatización.
Partamos de lo básico: si los procesos industriales son llevados a cabo por elementos electrónicos, el funcionamiento de estos depende de sus componentes. Hasta ahí, todos lo tenemos claro.
Ahora pasamos a la siguiente fase: en la automatización de dichos procesos intervienen dispositivos. Basados en componentes electrónicos industriales.
Es decir, los componentes electrónicos se encuentran en el corazón mismo de la automatización industrial. Y son parte integral de la cadena de valor de la industria y de su transformación digital.
Una vez más, nos encontramos con la pescadilla que se muerde la cola. Ya vimos en este mismo blog cómo automatización y digitalización van de la mano. Tanto, que a veces se confunden. No siendo lo mismo, ambas están íntimamente ligadas.
Y, en paralelo, los procesos automatizados en la fabricación de materiales electrónicos es una realidad, no exenta de inversión, desde hace tiempo.
El almacén automático: solución logística para el sector de los componentes electrónicos industriales.
En su máxima expresión, la automatización provoca que no se requiera intervención humana alguna. Ni en la recepción de productos o su almacenaje, ni en la preparación de pedidos o el mantenimiento de stock. Es lo que llamamos almacén inteligente.
Estos vienen siendo utilizados desde hace tiempo por grandes multinacionales. Sobre todo, aquellas relacionadas con la gran logística. Entre la mediana y pequeña empresa, sin embargo, se suele optar por un desarrollo previo: el almacén automático.
Gracias a un almacén automático, la organización es capaz de controlar tiempos, incrementar la eficiencia y reducir costes. Control y productividad son sus mayores beneficios.
La experiencia Biltron: nuestro almacén automático.
Con más de 30.000 referencias en stock, en Biltron necesitábamos encontrar una solución logística para poder atender las crecientes necesidades de nuestros clientes. Encontrar una que pudiera adaptarse a nuestras necesidades específicas era clave.
Teníamos un condicionante previo: la elevada inversión necesaria, tanto en dinero como en tiempo. A la hora no solo de implementar la tecnología. También había que invertir en la formación de los empleados. Y todo ello con los mínimos parones imprescindibles de actividad.
Frente al reto, la respuesta la encontramos en Cenker Robotics. Empresa del País Vaso especializada en proyectos de automatización industrial, con más de una década de experiencia.
Tras entrar en contacto con ellos, pasamos a una fase de análisis. Momento de medir la capacidad dinámica y estática del viejo almacén. De tener en cuenta los puestos de trabajo a equipar y formar. De buscar la mejor ubicación para la instalación. Y de pensar en posibles futuras ampliaciones, entre otros aspectos.
Se partió por tanto de un profundo diagnóstico previo. Su fin era estudiar la viabilidad de las diferentes soluciones, tanto técnica como económica. A continuación entramos en la fase de diseño preliminar de la solución en función de las necesidades de Biltron. Acompañada de su correspondiente presupuesto.
En nuestro caso se optó por un almacén automático vertical Miniload de cuatro puestos. Tres de ellos en el almacén y uno en la tienda. Y con programas de software incorporados: uno para la trazabilidad del material en el almacén (Logis One) y otro que se integró con nuestro programa de gestión (HMI).
Para que os hagáis una idea, el almacén consta de 4 pasillos con sus respectivos miniload. Ellos se encargan de la carga y descarga del material. Y distribuyen los productos a los diferentes puestos. Todo ello mediante cubetas a través de un circuito en loop automatizado.
Materializado el diseño, dio comienzo la fase de validación, a través de una serie de ensayos. Una vez superados con éxito, el almacén automático pudo comenzar con su funcionamiento normal. Sin embargo, para que lo haga de una forma correcta a largo plazo, el seguimiento de su actividad y su actualización son necesarios.
En ese sentido, Biltron implementó el pasado verano la devolución automática en los puestos en lugar de la manual, como se realizaba con anterioridad.
Nos convertimos así en la primera empresa del país en contar con un almacén automático vertical de estas características. Lo que nos ha hecho ser pioneros en el sector y ayudado a sentar las bases de nuestro crecimiento.
En cuanto a las principales ventajas que la adopción de un almacén automático nos ha reportado, se pueden resumir en las siguientes:
- Una reducción de costes, habiendo experimentado una rápida recuperación de la inversión realizada.
- Nos permitió optimizar procesos internos. Principalmente a través de un ahorro en errores al simplificarse las tareas.
- Logramos optimizar asimismo los tiempos de actividad. Por ejemplo, en las tareas de almacenamiento, los procesos de picking y la preparación final de los pedidos.
- Por supuesto, la trazabilidad de los productos mejoró mucho.
- Y, en nuestro caso, no supuso realmente una reducción de espacio. Pero sí un mejor aprovechamiento del mismo.
En definitiva, gracias a este almacén automático vertical logramos aumentar nuestra productividad al no haber disminución del rendimiento y si una gran precisión.
¿Qué puede hacer Biltron por ti?
En nuestro día a día nos impulsa el empeño de hacer de Biltron una referencia global en el suministro y distribución de componentes electrónicos. Para ello, en Bilbao Electrónica disponemos de un almacén automático con más de 30.000 productos en stock. Esto nos permite atender las necesidades de nuestros clientes a través de una amplia gama de referencias y un óptimo grado de seguridad en su entrega. Confía en nosotros.
