No cabe duda de que el mundo está inmerso en una era de transformación digital. Por ello, el sector de los componentes electrónicos se enfrenta a grandes retos en el campo de la digitalización. Y, por tanto, encara oportunidades. Saber aprovecharlas dependerá en gran medida de contar con un socio comercial como aliado. Vamos a verlo.
Desafíos a encarar con la transformación digital.
La digitalización está dando lugar a nuevos procesos empresariales, culturas corporativas y experiencias de los clientes. En el caso concreto de los componentes electrónicos, son varias las áreas a las que las nuevas tecnologías digitales van a afectar de manera especial.
Por ejemplo, habrá que estar atentos a la optimización de las cadenas de suministro. Un desafío que requerirá de grandes inversiones en un futuro cercano. La crisis de los semiconductores, en particular, y del comercio global, en general, nos han dado un buen aviso al respecto.
Esto a su vez tendrá un gran impacto sobre la logística y los inventarios, uno de nuestros grandes quebraderos de cabeza. La adaptabilidad en este caso será clave. Todas estas áreas sufrirán un proceso de adaptación para llegar a comprender mejor las necesidades del mercado. Y en consecuencia, dar una respuesta adecuada.
Habrá que afrontar estrategias de transformación digital que aborden las ineficacias y optimicen los procesos de diseño y verificación. Y para ello, deberemos contar con una fuerza de trabajo adecuada. A la que no solo atraer, sino retener dentro de un ambiente de trabajo innovador.
Probablemente se escape de los límites de este somero análisis, pero la deslocalización de fábricas y procesos será algo a tener en cuenta. Siempre que no queramos incurrir en errores del pasado.
Dentro de una tendencia hacia la reducción del consumo de energía y el uso de datos, el futuro está en las energías renovables, las soluciones sanitarias, la digitalización de las empresas del sector (del marketing a los procesos productivos), la robótica, el internet de las cosas y de la industria, el 5G y la automoción eléctrica. Y los componentes electrónicos y la instrumentación, así como los servicios de ingeniería ofrecidos al sector, tienen mucho que decir aquí.
Componentes electrónicos en un escenario de transformación digital.
La transformación digital de la que venimos siendo testigos en los últimos tiempos, influye en todos nosotros. Y por supuesto, también en la industria de los componentes electrónicos. Este proceso de digitalización se suma además a las características propias del sector a día de hoy.
El de los componentes de electrónica sigue siendo el mismo mercado muy competitivo de siempre. Pero al que ahora las nuevas tecnologías y la innovación han traído consigo muchos y novedosos desafíos. Que necesitan de respuesta, especialmente en las áreas de producto, organización y proceso.
Todo ello en un contexto internacional de incremento de costes debido a la inflación, cuellos de botella en el suministro con visos de solución e incertidumbre económica de esa que nos pone un poco nerviosos. Y pese a ello, el de los componentes electrónicos es un sector que no para de crecer. Entre otras cosas, gracias a la transformación digital.
Nos encontramos pues ante la siguiente situación: cada vez los componentes electrónicos son más complejos e innovadores; al mismo tiempo, cada vez son más demandados; y su incorporación al mercado se requiere, cada vez, con mayor rapidez.
Los fabricantes se ven apremiados para producir productos modernos donde se den cita el diseño, la mecánica y el software. Y lo tienen que hacer en plazos cada vez más cortos y a un ritmo de innovación sin precedentes. De locos.
La solución pasa, en buena medida, por la digitalización de las empresas. Un proceso que sigue siendo un reto, especialmente para las pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, y por contradictorio que parezca en la situación actual, este parece el momento indicado para afrontarlo.
Ya que los beneficios de este impulso son obvios: mejoras en la productividad, y por lo tanto en la cifra de beneficios de la empresa, así como en las condiciones de sus trabajadores.
¿Por qué los componentes electrónicos son (siguen siendo) cada vez más esenciales?
Los componentes electrónicos son utilizados en prácticamente todos los campos que te puedas imaginar. Casi todo producto eléctrico que utilizamos hoy en día está construido en base a circuitos, básicos o complicados. Y estos circuitos están hechos de muchas y diferentes partes (electrónicas, eléctricas, digitales y mecánicas) conectadas entre sí.
No debe extrañar entonces que la industria de los componentes electrónicos se sitúe en el corazón de toda la cadena de valor electrónica.
La tecnología de hoy, pero también la de mañana, depende de la disponibilidad de componentes electrónicos en el mercado. Sin ellos, el mundo se para. Justo lo contrario de lo que pretendemos en Biltron.
Efectivamente, que el mundo se siga moviendo y lo haga en el futuro, desde los dispositivos más sencillos a los más inteligentes, depende de ellos.
¿Qué puede hacer Biltron por ti?
Como siempre, adelantarse a las tendencias futuras y ofrecer productos y servicios innovadores que satisfagan las nuevas necesidades de la industria será clave. La adopción de nuevos métodos innovadores será esencial de cara a la optimización a largo plazo del sector. Haciendo así posible que la oferta se mantenga al ritmo de la creciente demanda.
La digitalización nos puede ayudar a afrontar y superar con éxito los retos que la creciente complejidad de productos, de organización y de procesos conlleva.
En ese sentido, las empresas que necesitan de componentes electrónicos e instrumentación deben estar respaldados por un proveedor global. Uno que pueda llegar a convertirse en un socio comercial y contribuir así a su éxito comercial.
Como distribuidor independiente de componentes electrónicos e instrumentación, en Biltron podemos obtener el producto que precisas al mejor precio.
